Quisiera reflexionar con ustedes algunos criterios que han servido para darle forma al Gobierno actual en el Estado de Jalisco. Convicciones profundas que nos llevan a definir objetivos, estrategias, políticas públicas, estructura del Gobierno del Estado.
La primer definición es la que un servidor tiene por lo que es gobernar. Y empezaría diciendo algunas otras visiones que no comparto, son reduccionistas. Por ejemplo, hay quien sostiene que gobernar es controlar, y gobierna mejor quien mejor controla; y crean entonces organismos, estrategias, dependencias para controlar a los demás. Hay quien piensa que gobernar es solamente ver por el crecimiento económico de una sociedad, y crea una estructura para solamente atraer inversión y solamente que crezca el volumen de la economía sin importarle si ese crecimiento está beneficiando a las personas en general o sólo a algún grupo de la sociedad.
Para mí gobernar en su concepción más sencilla es ayudar a la gente, porque el Gobierno tiene razón de ser dependiendo de las personas que viven, que vivimos en comunidad, que creamos una sociedad. No coincido con esa falsa lucha entre Gobierno y sociedad. Lo que existe, lo que importa es la gente organizada, los grupos de la sociedad; lo que importa son las personas y sus manifestaciones, y el Gobierno es un auxiliar de la sociedad, es un instrumento de la sociedad.
Con esta visión hemos llevado a cabo y estamos llevando a cabo cosas diferentes porque tenemos estas ideas diferentes. Por principio de cuentas el Gobierno se enfoca en las personas, un Gobierno enfocado en la persona y no en sí mismo. Deja de ser el punto importante la fortaleza del Gobierno, y pasa a ser la fortaleza de la sociedad el objetivo a perseguir.
Pero no hablar de sociedad como un ente abstracto y lejano, este Gobierno se enfoca en las personas, pero no para fomentar el individualismo, sino a las personas que interactúan en comunidad, que viven en una familia y que conforman la sociedad.
Esto es una visión radicalmente diferente que insisto, nos lleva a hacer cosas diferentes. Se desprende que trabajar para la gente es lo más importante y no trabajar para el Gobierno. Y luego entonces las prioridades en el quehacer público es todo aquello que ayude a la gente a vivir mejor como una expresión de cambio en la sociedad.
No, no somos un Gobierno eficientista que sólo busca medir en indicadores de desempeño el trabajo realizado. Buscamos medirnos de acuerdo a los cambios en la vida de la gente. Así es que nuestro foco de atención son las personas, las personas que viven en familia, que desempeñan su trabajo en una comunidad.
De esta manera ¿qué es lo importante para la persona que vive en familia y que actúa en comunidad? Pues eso es muy sencillo responderlo, porque a partir de ahí lo que le importa al Gobierno es lo que te importa a ti en tu casa, son las mismas cosas. Y entonces el Gobierno en verdad es un instrumento al servicio de las personas. Por ejemplo, a ti en tu familia te preocupa sin duda tus hijos.
Ahorita vengo un poco tarde, perdón por ello, de entregar el Premio Jalisco y el Premio Jalisco a la Juventud, son 18 personas las que se les entregó un reconocimiento, y a todos los jóvenes, siete jóvenes que se les entregó un reconocimiento se les grabó un video, y bueno, no me llama la atención porque yo, es una verdad evidente y recurrente, cuando le preguntan al joven “oye ¿y a qué debes este éxito?”, lo primero que dicen es “a mi familia y agradezco a mi familia”. Y no estamos hablando siempre de familias tradicionales, pero la familia se constituye, lejos de ese discurso de célula básica de la sociedad, en la política pública central de este Gobierno, porque así lo piden las personas, porque así se reconoce en todos lados. “¿Qué es lo que más te importa?”, le preguntan a alguien, “mi familia”; “¿cuál es para ti el valor más grande?”, “mi familia”; “¿qué es para ti lo primero que piensas cuando estás en problemas?”, “en mi familia”; “¿en quién te refugias?”, “en la familia”; “¿qué es lo que quieres para el futuro?”, que a los integrantes de tu familia tengan condiciones de desarrollo.
Esta es la visión central: si lo que hacemos en el Gobierno no le sirve a la gente que vive en una familia, pues entonces hay que revisar esa actividad porque se están desperdiciando recursos.
Al preguntarle a la gente “¿y qué te importa a ti en tu familia?”, lo primero es “pues tener trabajo”, porque aunque hay cosas que pudieran estar en una escala de valores por encima de los bienes materiales, el corto plazo, lo urgente nos dice que hay que comer hoy, y que hay que pagar la renta hoy, y que hay que tener vestido hoy, y que hay que proveer las necesidades materiales de la familia hoy. No los pongo en el primer lugar en la escala de valores pero sí en el ámbito de la temporalidad es lo primero que a todos nos preocupa. Luego entonces el quehacer gubernamental, apoyando a la gente, debe incidir en que haya más oportunidades, en que haya más empleo, en que las jefas de familia que lo necesitan y quieran hacerlo puedan generar un ingreso familiar; en que los jóvenes se puedan preparar para tener posibilidades de desarrollo pleno pero también mejores oportunidades en el ámbito laboral; el que la gente grande que ya no puede trabajar tenga el apoyo del Gobierno para salir adelante en esas necesidades de lo cotidiano, en esas necesidades que muchas veces son lacerantes.
Así es que un Gobierno humanista como es el de Jalisco entiende que en lo cotidiano, en lo urgente, la necesidad de trabajar y de llevar un ingreso suficiente a casa se convierte en algo prioritario, y el Gobierno debe estar ahí apoyando, proveyendo.
Como contraparte de esto, con la visión de que gobernar es ayudar a la gente en lo que es importante, pues hay mucha gente que no puede trabajar, por edad, por enfermedad, por circunstancias, que ya lo hizo durante mucho tiempo y que en justicia la sociedad debe compensar en algo todo lo que ha trabajado.
Un Gobierno humanista crea programas de apoyo a las personas para que puedan salir adelante sin importar su capacidad de creación de riqueza. Y ahí es donde vemos programas complementarios de apoyo a distintos segmentos que necesitan ese apoyo en nuestra comunidad.
Nos interesa también en nuestras familias y en nuestra comunidad vivir con más tranquilidad, sin sobresaltos, y sobre todo, tener esperanza, de estar construyendo un mejor futuro cada día, y nos preocupa el que los integrantes de nuestra familia puedan sufrir a causa de las adicciones o puedan caer víctima de una acción violenta y por lo tanto, le corresponde al Gobierno con la sociedad, plantear ese tema con seriedad. El tema de seguridad como algo que sí nos preocupa a todos y que entendemos que no tiene una respuesta exclusivamente policiaca.
El tema central de la violencia en nuestro País, habiendo varios enfoques, es que hemos construido una sociedad individualista, egoísta, en donde cada quien ve por sus intereses, en donde desde niño les decimos a nuestros hijos: “tienes que estudiar tal cosa para que ganes mucho dinero tú” y dejamos de entender que el hombre es hombre en la virtud en que lo es para los otros, que no está solo y que no puede actuar de manera individual.
Hemos creado una sociedad violenta por individualista, porque el individualista busca satisfacer sus necesidades sin poner límites en los derechos de los demás. No se explica de otra manera la existencia de violencia al interior de la familia, la violencia intrafamiliar, no se explica de otra manera la existencia de padres agresores, violadores; se le educó en que lo que importaba era él, su dinero, su placer, su disfrute, lo está expresando.
Y si vemos delincuencia organizada, es una expresión sofisticada de una realidad mucho más profunda. Contra este individualismo que tiende a generar injusticias, la propuesta de Jalisco es la solidaridad a través del fortalecimiento de las organizaciones de la sociedad civil, a través de la implementación de políticas públicas que lleven a disminuir la inequidad que crea el individualismo.
Hemos sido reconocidos en diciembre del año pasado, en estos últimos cinco años en que se hace un estudio por parte del INEGI, hay un indicador científico que mide la inequidad y que se llama Coeficiente de Gini, ahí en ese Coeficiente de Gini se dice que en Jalisco ha disminuido la inequidad al estar fortaleciéndose políticas públicas que buscan construir una sociedad basada en la solidaridad.
Por eso la importancia de organizaciones como las de ustedes, por eso la importancia de eventos como este. Mi visión es subordinar el Gobierno a la sociedad, entendiendo a la sociedad como las personas organizadas en grupos sociales que trabajan por el beneficio de todos; no entiendo como sociedad solamente a individuos aislados que tienen capacidad de generar opinión. No entiendo como sociedad a quien tiene poder económico y es capaz de hacer cosas. No entiendo como sociedad a quien tiene poder político y por lo tanto, puede hacerse escuchar.
Entiendo como sociedad a las personas que son concientes de que deben trabajar para fortalecer el tejido social y desde ahí buscar el desarrollo pleno de todas las personas a través de estos organismos, de estos grupos que trabajan por los demás.
Es, una frase que podría identificar esto: Antes se decía “viva el supremo Gobierno” ahora yo digo: “Muera el concepto de supremo Gobierno”, porque lo que es supremo no es el Gobierno, son las personas, las personas agrupadas que trabajan solidariamente por el bien de los demás. Así es que, que vivan las organizaciones de la sociedad civil y que muera el concepto de supremo Gobierno y que viva el concepto de Gobierno que sabe ayudar a los demás y que trabaja para ayudar a los demás. ¿Cómo vamos en tiempo, Martín? Sigo.
¿Cómo se hace esto? Porque desde que yo nací, escuché que los gobiernos, nací en el ’60, ahí es donde la mitad de ustedes dicen “uuuhh”, porque veo otros que son de antes. Cuando yo nací, lo que escuchaban todos los círculos es que el Gobierno era corrupción, y que Gobierno era el mal de la gente y que había qué alejarse de todo esto. Cuando crecí, no crean que tanto, dije: “Bueno, si Gobierno es corrupción y los que están ahí son corrupción ¿Por qué no hacemos algo? ¿Por qué no buscamos transformar eso? ¿O será cierto que los mexicanos traemos el gen de la corrupción? Yo digo que no, y que podemos demostrarlo haciendo cosas diferentes, al menos no, yo no creo en que mexicano signifique corrupción.
Y buscamos entonces llegar a los cargos públicos para transformar esto, y cuando tengo la oportunidad de encabezar un proyecto de Gobierno, primero como Presidente Municipal de Guadalajara, dije: “A ver: ¿Por qué la gente no cree en el Gobierno?” Pues porque cada tres años y cada seis años de repente te encuentras con noticias de personas que se enriquecen con el empobrecimiento del pueblo, con el dinero del pueblo. ¿Cómo se revierte? Bueno, primero, llevando gente honrada a los cargos públicos, pero segundo, instalando sistemas de transparencia para que quien es honrado lo siga siendo y que el que no lo es, lo descubramos y podamos actuar.
Si queremos la participación de la gente, si queremos fortalecer el tejido social, si queremos evitar la existencia de un Gobierno supremo, todopoderoso que aplasta a las personas, debemos empezar por la transparencia para generar credibilidad. Dime Gobierno que no te estás robando mi dinero, dime Gobierno qué estás haciendo con la autoridad que yo te he dado. Transparentar para crear credibilidad, transparencia y rendición de cuentas como principio para la participación ciudadana. Si no hay esto, el ciudadano se siente utilizado, instrumentalizado en servicio al Gobierno, por eso en México, durante mucho tiempo la participación ciudadana era escasa, ahora está creciendo y ustedes son una muestra de ello.
Así es que un Gobierno que ayuda a la gente es un Gobierno transparente, que rinde cuentas, honrado, que trabaja por generar esos resultados. Un Gobierno con esta visión, en donde Gobernar es ayudar, forma, ayuda a la formación de liderazgos, pero ayuda y respeta a los liderazgos. Un Gobierno humanista no busca crear liderazgos para absorberlos, para instrumentalizarlos, para utilizarlos en beneficio de causa alguna.
Un Gobierno humanista sí se compromete en la formación de liderazgos pero, sobre todo, se compromete en el respeto de esos liderazgos, que puedan hacer en la sociedad lo que su organismo decida que hagan y no que se conviertan en instrumentos no pagados al servicio del supremo Gobierno.
Un Gobierno que se precia de ser humanista, busca crear sinergia con organismos de la sociedad civil, entiende su lugar que es de subordinado de la sociedad, entiende su naturaleza instrumento al servicio de los demás y no al revés y por lo tanto busca encontrar cómo potenciar lo que hacen ya los organismos de la sociedad civil.
Y aquí entran estos programas que Martín encabeza para vincular organizaciones de la sociedad civil y que compartan sus experiencias, para formar liderazgos, pero también para regresarles parte del dinero del pueblo al pueblo, convencidos de que hay más beneficios para las personas cuando ese dinero se emplea con la generosidad con que lo hacen las organizaciones de la sociedad civil.
En donde el dinero normalmente es para infraestructura, equipamiento, para los beneficios que se entregan a los demás y no para el sostenimiento de una carga burocrática que pudiera resultar pesado.
No debemos verlos a los grupos de la sociedad civil como grupos que hacen las funciones que debería hacer el Gobierno, yo insisto, no creo en la visión del supremo Gobierno, ese que lo mismo tenía tortillerías que empresas de aviones.
Al Gobierno le corresponden algunas funciones que le son por naturaleza y que tienen que ver con el ordenamiento, con la justicia, con la promoción, con el orden, pero no le toca hacer al Gobierno todo lo que antes se creía. Lo que le toca es fomentar que los grupos de la sociedad lo hagan y porque normalmente lo hacen mejor que el Gobierno.
No creo en un Gobierno paternalista que cree incapaz a la sociedad de valerse por sí misma, creo en un Gobierno subsidiario, en donde el Gobierno hace solamente aquello que no le es posible hacer por su naturaleza a la sociedad organizada. Esto propicia el fortalecimiento del tejido social.
Ahora con tanto problema de violencia que hay en algunos lugares de nuestro país, en el discurso se dice “es que hay que fortalecer el tejido social” ¿qué es eso? Esto, trabajo que hacen ustedes, eso es fortalecer el tejido social.
Los principios que rigen a mi Gobierno, por un lado les decía subsidiariedad, que no haga una instancia superior lo que pueda hacer otra instancia y esta subsidiariedad implica que el apoyo que se da también debe ser temporal, en beneficio de las organizaciones de la sociedad civil, no puede haber una dependencia de su quehacer hacia el Estado.
Al Estado le corresponde apoyar y este apoyo debe ser temporal en la medida en que se fortalece este grupo y puede salir adelante por sí mismo y al Estado le corresponde entonces tomar otro grupo y brindarle el apoyo que se hacía al anterior.
Este Gobierno cree en la solidaridad, la solidaridad es a fuerza de unión entre las personas, es el dolerse del dolor ajeno, es el deseo de ayudar a los demás por el simple gusto de hacerlo.
Manifestaciones de solidaridad en nuestro país todos los días, mucho más evidentes cuando hay calamidades, tragedias, desastres en donde surge la solidaridad del pueblo de México tendiéndole la mano al hermano que sufre.
La subsidiariedad es sólo lo necesario, mientras sea necesario hasta el nivel que sea necesario, de no ser así estaríamos yendo en contra de la sociedad, fortaleciendo al Estado, debilitando a la sociedad.
Por ello insisto, los apoyos del Gobierno deben ser siempre temporales, fortalecer a los organismos de la sociedad civil no debe verse como estrategia política, sino al contrario, para romper una dinámica de control político las organizaciones de la sociedad civil, deben ser más fuertes que el Gobierno.
Otra visión de Gobierno, aquellos que creen que gobernar es controlar y que el Gobierno es en su beneficio, descubrían un líder que emerge en la sociedad y había dos alternativas; lo cortaban ofreciéndole incorporarse al Estado y si no podían lo neutralizaban con amenazas o como fuera. Y durante mucho tiempo nuestro México estuvo ausente de liderazgos y de grupos sociales fuera del Gobierno.
La existencia de ustedes nos habla de un México diferente, en donde la sociedad se organiza y por sí crea estos grupos que la fortalecen. No podemos permitir que las organizaciones de la sociedad civil busquen ser controladas por el Gobierno, hace rato decía yo hay que crear sinergia, pero sinergia es ir juntos hacia un objetivo común , no es subordinar estos grupos a la voluntad o al capricho de gobernantes y mucho menos a las aspiraciones legítimas o no de partidos o de candidatos.
La verdadera fortaleza de la sociedad civil se da en la medida en que esta sea en la práctica más fuerte del Gobierno, porque está sobre el Gobierno.
Las organizaciones de la sociedad civil deben ser el signo de una sociedad fuerte, que verdaderamente propicien la participación de la gente. A veces la gente de bien quiere ayudar, quiere hacer, quiere entregarse y no encuentra caminos, y no confía en el Gobierno y no debe ser a través del Gobierno.
Esa es la razón de ser de estos grupos, canalizar la participación, el deseo de la gente de ayudar, de servir, de construir mejores condiciones de vida.
Esta participación, fortalece a la sociedad, pero también desarrolla a la persona, Platón decía que el hombre se desarrolla plenamente en la medida en la que participa de las cosas publicas, surgiendo aquí con Platón, todo el concepto de la republica, la res pública, la cosa pública, entendiendo que la persona lo es en la medida en que interactúa con las demás, que siente con los demás, que sufre con los demás, que se preocupa, que también disfruta de los éxitos de los demás.
Una sociedad no debe temer en empoderar a sus organismos ciudadanos, por el contrario, organismos ciudadanos fuertes, Gobierno disminuido al tamaño necesario. Como respuesta a ésta definición, los gobiernos por otro lado, no deben temer la participación ciudadana, por el contrario la deben fomentar como este signo de desarrollo, como este camino de desarrollo.
Sólo los gobiernos totalitarios temen a la sociedad, sólo los gobiernos impositivos temen el surgimiento del liderazgo, sólo los gobiernos dictatoriales temen que la sociedad se organice.
Un Gobierno humanista como el que me precio de encabezar que quiere ayudar a la gente, que se lo ha propuesto como objetivo, ayudar a la gente promueve la participación activa de los ciudadanos. Busca disminuir el tamaño y las funciones del Gobierno para que se fortalezca la sociedad.
Quiero ratificar esta visión y si pudiera resumirla en una frase diría de la manera en que empecé. Yo trabajo para que muera el concepto de supremo Gobierno, para que viva el Gobierno al servicio de las personas y para que viva una sociedad cada vez más fuerte, organizado desde sus propios grupos con los liderazgos naturales que nuestra sociedad tiene.
Quiero terminar, agradeciendo, no sólo por estar aquí sino porque ustedes hacen posible un Jalisco mejor y en donde quiera que trabajen ustedes lo hacen por ayudar, por solidaridad, por amor, como quieran decirlo.
Quiero agradecer porque ustedes hacen eso que se necesita, trabajan con la gente que está en situaciones vulnerables, con personas que tienen discapacidad, con mujeres golpeadas, con madres solteras, con personas que viven en pobreza alimentaria, con personas que sufren con las adicciones.
Les quiero agradecer porque ustedes forman liderazgos, porque ustedes nos dan ejemplo, el lugar en el que estamos es representativo. Hace 200 años una persona se propuso ayudar a los grupos vulnerables, niños y ancianos y personas enfermas y crea la Casa de la Misericordia como se llamaba en ese entonces y luego se llamó Hospicio Cabañas, hace 200 años.
También otro ejemplo a la humanidad doliente, de apoyo a la humanidad doliente en la creación del Hospital Civil y de muchas obras en beneficio de los demás. Estas obras perduran en el tiempo, no por lo ladrillos o piedras con las que fueron construidas, sino por el amor y entrega que sus fundadores pusieron en la obra; perduran no por los apoyos de los gobiernos o de los, las instituciones públicas, perduran porque la nobleza de sus fundadores, a siglos de su fundación, sigue atrayendo a las personas de bien para que de manera voluntaria aporten lo más preciado que tenemos todos y que es nuestro tiempo.
Mi deseo es serte útil a ti, a ti que trabajas por los demás y no quiero caer en la frase trillada, en la construcción de un no sé qué, mejor no.
A ti que trabajas con la persona concreta, a ti que te preocupa porque no tiene cómo ayudarle más, yo me ratificó a tus órdenes porque tú estás trabajando por Jalisco y porque yo encabezando el Ejecutivo de Jalisco, entiendo que mi función es ayudar a la gente y si tú ya lo estás haciendo, lo menos que puedo hacer es ayudarte para que hagas mejor tu trabajo.
Gracias por lo que hace, gracias a nombre de todas las personas que estás apoyando, no te canses hacerlo porque no estás sólo, contigo estamos muchos.
Felicidades.
Sesión de preguntas y respuestas
Pregunta: ¿Si usted considera que los programas en los cuales se ha incrementado el apoyo a diversos sectores, se van continuar independientemente del Gobierno que continúe?
Respuesta: A está tiene jiribilla electoral.
Pregunta: ¿(Inaudible)?
Respuesta: Vienen…
Pregunta: ¿Cómo integra a aquellos grupos, personas, organizaciones que no comparten la visión del Gobierno en turno, legítimamente constituido, los que están en Francia, en franca oposición con esa visión? Y la siguiente dice ¿cuánto tiempo habrá que esperar para que proceda el amparo para una organización de la sociedad civil?
Respuesta: Eso no sé pero bueno. Bien, mira, no, lo que se hace no es lineal, la sociedad no es lineal, así como vemos manifestaciones de que ocurren cosas similares a los sesentas ahorita, no sólo la moda, también estamos viviendo un cambio de época en el mundo.
Vemos situaciones de indignación, de inconformidad, avances, retrocesos, no, lo logros que se tienen no son lineales, vemos países que dejaron la dictadura entrando a procesos de democracia y después están regresando a procesos dictatoriales disfrazados, el caso de Venezuela me parece que es contundente.
Lo que se hace no quedó ya para siempre sino queda en la cultura, por lo tanto, creo que lo más importante que podemos hacer es cambiar la cultura en la que nos movemos, de esa cultura individualista una cultura de la solidaridad.
Cuando aceptamos algo y está en nuestra cultura, no importa si está o no en la Ley, lo vamos hacer porque es parte de lo nuestro, la cultura es todo aquello que creemos, que somos, que hacemos, en lo que nos movemos, nuestros puntos de referencia.
En la medida en que lo que queremos lo asimilamos ya en la cultura que importa lo que quiera el Gobierno, pero mientras no sea parte de nuestra cultura, yo les digo, tengan mucho cuidado y vean a quién le dan su voto, es conozcan a los candidatos, yo les diría “no voten solamente por el color de un partido”, lo que importa es a quién le van a dar ustedes su confianza, qué persona, cuál es su trayectoria, quiénes están a su alrededor, lo que se ha logrado en Jalisco y que es mucho gracias a ustedes ¿no? nada garantiza que así siga.
Hemos mejorado dos niveles en materia de pobreza comparados con los otros estados, hemos mejorado un nivel en materia de marginación, hemos avanzado muchísimo en la dignificación de vivienda, muchas cosas, el apoyo a personas de la tercera edad, el fortalecimiento del tejido social, no nada nos garantiza que esto vaya a continuar, así es que mi única recomendación es, mientras no sea parte de nuestra cultura fíjense por quién votan y eso sí, voten, porque no nos podemos luego de algo sino participamos.
¿Qué tienen que hacer los grupos que tienen una visión diferente? Mira, habría que acotarlo, si es una visión electoral no hay ningún problema, si es una visión política no hay ningún problema, si es una visión de definición, bueno, pues este no sé, no veo ningún caso en donde pueda haber alguna discordancia con los grupos de la sociedad, yo veo aquí grupos que apoyan a personas enfermas de SIDA en fase terminal. ¿Quién puede oponerse al apoyo que hacen estos grupos?
Yo veo personas aquí que trabajan con familias que están en pobreza alimentaria, o sea ¿quién puede oponerse a ello? Yo veo aquí a personas que trabajan con madres solteras adolescentes, pues hay que apoyarles, tienen necesidad de todos nosotros, no entiendo cómo pudiera haber una visión diferente, mi visión es ayudar a la gente
¿Qué es lo opuesto de ayudar a la gente? Pues perjudicar a la gente ¿Quiénes perjudican a la gente? Pues un mal empresario que pudiendo pagar un buen sueldo no lo hace para llevarse el dinero a su casa, no pues yo también estoy en contra; un mal líder sindical que instrumentaliza a los trabajadores para su beneficio personal o de partido, pues estoy en contra; un papá golpeador, que abusa de sus hijos o que los explota comercialmente, pues yo estoy en contra.
Si algo ayuda a la persona yo estoy ahí, si algo no ayuda pues estoy en contra y dentro de está visión mi visión es muy sencilla, si alguien quiere ayudar cuenta conmigo, no me importa que partido vote, no me importa que equipo de futbol simpatice, no me importa su preferencia o definición religiosa o de género, o sea, eso no me importa a mí, a mí lo que me importa es ayudarle a la persona individual y si tu grupo quiere ayudarle a esa persona en lo individual yo estoy ahí, sin preguntar nada, porque cuando empiezas a preguntar empiezas a discriminar, y entonces lo que importa ya no es la persona sino el yo, el beneficio, el grupo, el partido y eso no está bien, eso ha hecho México mucho tiempo, le da poquito a los pobres en tiempo electoral para que voten por el partido que les da, eso no está bien.
Eso es lo que estamos cambiando, por eso mi Gobierno pretende ser diferente, no instrumentalizar organismos, no subordinar liderazgos, al contrario potenciarlos, crear sinergía, no crecer el Gobierno, disminuir el Gobierno y ponerlo al servicio de la gente, ese es el cómo.
Pero la visión es muy sencilla, yo estoy aquí para ayudar a la gente, los narcos no ayudan a la gente, pues no, no estoy con ellos. Él que violenta, el que daña, el que mata, el que oprime, el que esclaviza no ayuda a la gente, pues no estoy con ellos, afortunadamente esos son muy poquitos, la mayoría somos gente de bien.
El tema del amparo se los quedo a deber, no sé, pero voy a investigar, voy a investigar en eso.
Muchas gracias por su tiempo, muchas gracias por su ejemplo y bueno, vamos a seguir trabajando junto con ustedes, enhorabuena.