jueves, 17 de noviembre de 2011

Discurso pronunciado por el Gobernador, Emilio González, durante la entrega de la Presea “Jalisco, Honor y Distinción” al Excmo. José Mujica Cordano.

Es un honor para nosotros recibir una personalidad como lo es el Presidente José Mujica. He tenido la oportunidad de intercambiar palabras con él, es muy fácil platicar con quien tiene una responsabilidad pública y que le nace la motivación en el deseo de ayudar a la gente.

Esto es algo que proyecta el Presidente Mujica. Sí es un político pero es un político diferente como queremos ser muchos políticos; es un político que no está sujeto a los cartabones de “lo que debería ser”, sino que proyecta en todo momento su deseo de ayudar a la gente.

Se percibe en su charla la preocupación de lo fundamental que debiéramos tener todos los que decimos ser servidores públicos: las preocupaciones cotidianas de nuestros gobernados. Preocupa el que la gente tenga qué comer, el que la gente tenga un techo que le cubra, el que tenga esperanza y oportunidad de futuro a través de la educación, el que se puedan aprovechar las fortalezas que tiene su país en beneficio de las familias.

Yo encuentro una gran identificación personal con el Presidente Mujica cuando nos dice que la globalización no lleva implícita la justicia, que la globalización responde a fenómenos de mercado, y los que tenemos responsabilidad de ayudar a la gente, debemos movernos por la búsqueda permanente de la justicia, en el sentido más amplio.

Es en verdad un honor el tener la oportunidad de contar entre nosotros a una personalidad con este empaque. Y nos ha sido muy fácil encontrar puntos de coincidencia de mutuo beneficio, nos ha sido muy sencillo reconocer oportunidades que puedan ayudar a las familias del Uruguay pero también a las familias de Jalisco.

Reconocemos el esfuerzo del Presidente Mujica y de su equipo por crecer en áreas significativas como es la trazabilidad en la industria pecuaria, algo necesario para Jalisco.

Reconocemos en el Presidente del Uruguay el esfuerzo que hace por la implementación de tecnologías de información y comunicación para mejorar la educación y hacer que la educación sea el verdadero camino del desarrollo de la gente. Hay muchos puntos de coincidencia y en eso me congratulo.

No es ésta una visita protocolaria que quedará en el archivo, sino es el inicio de una relación de dos pueblos hermanos que quieren construir juntos un mejor futuro.

Por ello y como un acto especialísimo es un honor para mí el poder imponer al Presidente José Mujica la Presea “Jalisco, Honor y Distinción” que se le entrega por su trayectoria de servicio y como un elemento tangible que nos permita visualizar un mejor futuro para el Uruguay y para Jalisco a través de este trabajo conjunto, a través de esta esperanza compartida de construir un mundo mejor.

Agradezco la presencia del Presidente Mujica, de todos nuestros hermanos del Uruguay que han hecho este viaje, una distancia muy larga que han recorrido para reconocernos como muy cercanos.

Muchas gracias por estar aquí, es un honor Presidente, reconocerle a nombre del pueblo de Jalisco.

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