Muchas gracias, muy buenas tardes.
Saludo a todos los asistentes a este
evento.
Saludo y agradezco a las personas que
han participado en la elaboración de este estudio, el Informe Jalisco “Más Allá
de la Guerra
contra las Drogas”. Nos dicen los estudios que en Jalisco se ha contenido de
mejor manera el crecimiento en las adicciones, estamos por debajo del promedio
nacional, aún así ahí se evidencia que tenemos problemas.
En nuestra sociedad hay resultantes,
hay resultados, diseñados de manera conciente o inconciente, frutos todos ellos
de la cultura que hemos generado, y hay cosas que nos gustan y hay cosas que no
nos gustan.
La semana pasada inauguramos, gracias a
la solidaridad, a la generosidad de muchas personas, un centro de atención a
niños con discapacidad intelectual en situación de abandono. Eso está bien, hay
gente solidaria, comprometida, somos testigos de jóvenes exitosos a nivel
nacional en áreas académicas, deportivas, hay muchas cosas muy bien en nuestro
Estado gracias a la sociedad, pero también hay cosas que nos preocupan que no
están bien, hemos creado una cultura individualista, egoísta, hedonista en
ocasiones, que tiene consecuencias que no están bien, que agreden, que dañan,
que deshumanizan.
Una de ellas es, sin duda, las
adicciones y la problemática a su alrededor llegando al extremo de la
violencia, pero no es la única, tampoco está bien en nuestro Estado el
crecimiento en la violencia intrafamiliar, por ejemplo, y tiene qué ver con
esta misma cultura que hemos creado.
Tampoco está bien y es una resultante
negativa el que cada día se consume en nuestro Estado, consuma en nuestro
Estado, como se diga, un suicidio; quedan otros en tentativa, hay algo mal que
estamos haciendo en la sociedad. La cultura que hemos creado tiene aspectos
negativos.
Hemos actuado desde el principio, lo
hemos hecho de la manera en que lo hemos entendido mejor, hay resultados
positivos y a mí me alienta el saber que el desempeño de Jalisco es diferente
al desempeño nacional, pero hay cosas ahí que no alcanzamos todavía a operar.
Por eso era importante conocer más de
este problema para poder actuar mejor. Éste no es un ejercicio solamente
académico, no termina aquí, se termina la parte académica con la presentación
del libro, pero es apenas la primera etapa. No buscamos un mero trabajo
intelectual, no es una tesis doctoral, no es sólo leer para saber más, no, no
es ese el objetivo. Buscamos entender más este problema para actuar mejor. Para
ello, era importante que este estudio no lo hiciera el Gobierno, había que ir
con quien tuviese la independencia intelectual, independencia de criterio,
solidez científica en la investigación, para que pudiera encabezar este
proyecto, por eso hace poco más de un año platicando con Héctor Aguilar, nos
propusimos mutuamente este reto, el reto para ellos era profundizar en este
fenómeno, qué está ocurriendo en nuestro Estado; el reto para nosotros era no
incidir en la elaboración del estudio, que salga lo que tenga que salir para
tener una base lo más apegado a la realidad posible que nos permita actuar de
mejor manera.
Ese es el propósito, por ello,
expertos, científicos, investigadores, ajenos a éste y a cualquier Gobierno; personas
con capacidad intelectual para poder llevar a cabo esto, y sólo pusimos una
condición inherente a todo trabajo científico, a todo aquel que busca la
realidad. No hay dogmas en esto, no hay ideologías, lo que queremos es la
verdad, la realidad de las cosas para desde ahí poder actuar.
Ahora es una obligación de los estados
pero cuando empezamos esto no lo era, porque hemos partido de una base desde el
primer día de este Gobierno. Quien sufre por el abuso de una adicción, quien
sufre como la consecuencia de un acto violento pues es jalisciense y no nos
debe interesar si es algo federal o estatal, es una persona que está sufriendo
y que espera de su familia, de su comunidad, de la sociedad organizada, una
respuesta, una ayuda, y esto tiene que ver con la no, el no hacer delincuente a
quien consume, sino verlo como una persona que está sufriendo y que a veces no
sabe que necesita ayuda y a veces en su silencio, en su desesperación, en su
síndrome de abstención lo que está pidiendo es ayuda a una sociedad que no se
da cuenta, que a veces da la espalda, que margina, que señala, hasta que esto
le llega a la casa, y entonces nos damos cuenta que no estamos ajenos y que
cualquiera de nosotros o de nuestros hijos puede ser víctima de esto, y comprendemos
entonces que este es un problema que le obliga al Gobierno sí, pero no sólo al
Gobierno, qué bueno que el Gobierno haga cosas, pero éste es un tema de
nosotros, de las personas, de nuestras familias, de nuestra comunidad.
Ése es el propósito de este estudio: entender
más para actuar de mejor manera, entender más qué propicia la violencia, qué
mueve a la gente que consume; cuál es el sentido de la vida, si es que existe,
si es que está claro.
Incluso en aquellos que promueven las
adicciones, qué hay con la
rehabilitación, qué hay con la prevención familiar, comunitaria, social, ¿funciona
o no funciona, las instituciones?, ese es el tema.
Como propósito de este libro, con toda la
autoridad de los señores que lo hicieron, el poder proponer políticas públicas
para traer la atención de los gobiernos estatal y municipales, para atraer la
atención de diputados y de jueces, pero sobre todo para atraer la atención de
la sociedad.
No es un libro del Gobierno, es un informe
que busca reflejar la realidad de nuestro Estado y que lo primero que pide es
que sea leído, por eso yo espero que nadie se vaya sin su ejemplar ¿tenemos
aquí libros? Sí, yo les pediría que nos tuvieran un poquito de paciencia y no
se vayan sin su ejemplar porque lo primero que se pide es que sea leído.
Segundo, que sea debatido, ahí hay nueve estrategias que se están planteando,
políticas públicas, como quieran llamarle, que vale la pena ser debatidos para
ser enriquecidos. En un trabajo de esta naturaleza pues está la esencia de lo
que se debe hacer pero se debe enriquecer y aterrizar.
Después de ese debate debe haber consensos
sociales, debe haber consensos y del consenso debe surgir el compromiso: qué te
toca, qué me toca, qué le toca a tu organización social, qué le toca al
Gobierno del Estado, qué le toca a los gobiernos municipales, qué le toca a los medios de
comunicación, qué le toca a las universidades, qué le toca a los empresarios,
qué nos toca a cada uno de nosotros. Si vemos estos temas como algo ajeno pues
no sirvió el esfuerzo o no ha dado el fruto.
Uno de los frutos buscados es que tú y yo veamos
que aunque tú y yo tal vez no consumamos o no hayamos consumido nunca, lo veamos
como un problema que nos afecta, a final de cuentas yo creo en un principio
romano muy antiguo que decía: de qué te sirve que esté en la ley, si no está en
la cultura, si no es forma habitual de vida.
Si lo pones en la ley pero no está en la
cultura pues vas a tener que utilizar la fuerza del Estado para hacerlo
obligatorio. A lo que debemos aspirar es a cambiar nuestra cultura por una
cultura más humana, y contra el individualismo, la solidaridad; contra el hedonismo,
un sentido profundo de la vida, el saber que somos parte de una sociedad que sufre
y que requiere de ti y de mí para que esas personas que tienen rostro y nombre
y apellido, reciban en verdad la ayuda que les permita vivir una vida más
humana.
Ése es el propósito que al menos yo he
percibido, he tenido la fortuna de poder platicar más del tema con Héctor, con
los doctores que son coautores en esta investigación, y la verdad de la lectura
de este libro, además de la información y además de las estrategias que de ahí
se desprenden, lo que surge y lo que no se puede hacer uno de lado, la gente de
bien no se puede hacer de lado, es decir “no me importa que me queden cuatro
meses y medio y contando, de Gobernador, esto es algo que está para siempre en
todos los ámbitos, buscar que nuestra sociedad la gente viva mejor en una
cultura que humanice”.
Los invito entonces a leer el libro, a
debatir, tampoco creo que sea la Biblia, hay cosas que se pueden mejorar, ¿no?,
es una obra humana; a debatir, a enriquecer, a llegar a un nivel que nos cuesta
mucho trabajo a los mexicanos, a acordar, y después de este acuerdo, junto con
este acuerdo, a tomar la responsabilidad de lo que a mí y a ti nos toca hacer,
y entonces todo esto tendrá sentido, dejará de ser un trabajo solamente
intelectual, solamente académico-científico para convertirse en una obra humana
que busca ayudar al que lo necesite.
Pues los invito a leerlo para empezar,
gracias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario