Ubu Rey la mejor puesta en escena de la Muestra Estatal de Teatro

El premio a la mejor puesta en escena fue para “Ubu Rey”, concluyendo así la Muestra Estatal de Teatro, que organiza la Secretaría de Cultura de Jalisco a través de la Dirección general de Actividades Culturales y la Dirección de Artes Escénicas.

Esa misma obra le brindó Ihonatan Ruiz, el reconocimiento para la mejor dirección; en tanto, el galardón al mejor actor fue compartido por Manuel Parra, de “Perros hinchados a la orilla de la carretera”, Rodrigo Becerril y Mario Montaño, de “No Tocar”. El premio a mejor actriz fue para Sofía Olmos, por “Adiós querido Cuco”.

Otros galardonados fueron Said Sandoval y Bárbara Barba, por mejor co-actor y co-actriz; la mejor iluminación la ganó Luís Manuel Aguilar “El Mosco”; la mejor música fue para la obra “La Malinche”, el mejor espacio escénico lo ganó Carolina Jiménez y el mejor vestuario fue para Moisés Orozco, por la obra “Hidalgo el primer caudillo”, montaje estrenado en la clausura del evento.

“Ubu Rey”, “Perros hinchados a la orilla de la carretera” y “Adiós querido Cuco”, fueron las tres obras ganadoras de la muestra y representarán al estado de Jalisco en Muestra Nacional de Teatro que se llevará a cabo en esta ciudad en el mes de noviembre.

Previo a la ceremonia de premiación y clausura de la muestra, el público que se dio cita en el Foro de Arte y Cultura presenció el estreno de “Hidalgo el primer caudillo”, obra de Diego Figueroa, escrita en 1953, a petición del gobernador Agustín Yáñez, para conmemorar el 200 aniversario del natalicio del “Padre de la Patria”.

La obra tuvo una lectura dramatizada en el Teatro Degollado y ayer fue su estreno formal, en el marco de las celebraciones del Bicentenario de la Independencia y del Centenario de la Revolución Mexicana.

En la obra el general Arias (David Venegas Norzagaray) y el general Allende (Marco Antonio Orozco) se unen para disputarse la jefatura de Hidalgo, para lo que planean un complot en su contra. Más tarde Hidalgo entrega el poder a Allende para que dirija las acciones militares en el Puente de Calderón. Ahí son derrotados por las fuerzas realistas, debido a las fallas de Allende, sin embargo éstas le son atribuidas a Hidalgo.

Al salir de Guadalajara a marchas forzadas son hechos prisioneros e Hidalgo es juzgado por la inquisición y sentenciado a muerte sin que Hidalgo cediera a las presiones de sus verdugos para retractarse de lo que había hecho.