Hace un año estuvimos aquí con ustedes analizando y discutiendo sobre la problemática de la familia, en el entorno actual, hace un año nos hemos comprometido a dar seguimiento a los temas que ahí se trataron, estos Congresos encuentran su justificación no sólo por el intercambio de experiencias sino por los compromisos que aquí surgen, que se llevan a la realidad en nuestros entornos particulares.
Hace un año también el Gobierno del Estado asumió tareas específicas, de las tareas que asumimos para con ustedes, para con las familias de Jalisco quisiera referirme a una en particular, reconociendo el trabajo de la Secretaria de Salud de Jalisco con el Doctor Petersen, de la Secretaría de Educación ahora con Antonio Gloria, del Centro Estatal contra la Adicciones con Joel, en la Universidad de Guadalajara con el Rector Marco Antonio Cortés Guardado, y el Instituto de Psiquiatría, Juan Ramón de la Fuente.
Nos hemos dado a la tarea este año de hacer un estudio a fondo de lo que ocurre, alrededor de las adicciones en nuestros jóvenes en Jalisco, hicimos un estudio profesional con el aval técnico de estas instituciones y quisiera compartir con ustedes algunos de sus resultados que tienen que concluir en políticas públicas por parte de los gobiernos pero también en acciones de la sociedad y muy en particular, en compromisos al interior de nuestras familias.
Es muy extenso el estudio, me referiré en este caso son algunas de sus variables, todos los recibos que se aplicaron, buscan medir los actos antisociales vinculados con el consumo de drogas, y se ha divido el estudio entre quienes nunca han consumido, quienes lo han hecho de manera experimental y quienes son consumidores de algún estupefaciente.
Por ejemplo, a la pregunta de si, bueno se aplicó en secundaria y en prepa en Jalisco, imaginen un poco las edades y el entorno, cuando se pregunta ¿Si ha tomado un auto sin permiso del dueño? Quien no consume lo ha hecho en el tres por ciento, quien sí consume lo ha hecho en un 18 por ciento, seis veces más esta conducta antisocial.
Se pregunta ¿ha tomado dinero o cosas con valor de 500 pesos o más? Quien no consume lo ha hecho un uno por ciento, quien sí consume lo ha hecho un 14 por ciento, o sea 14 veces más quien consume alguna droga contra quien no lo ha hecho.
¿Ha forzado cerraduras para entrar a algún lugar que no sea su casa? Lo ha hecho el uno por ciento de los que no consumen y el 12 por ciento de los que sí consumen ¿Ha tomado mercancía de una tienda sin pagarle? El cuatro por ciento de los que no consumen el cuatro por ciento lo ha hecho, contra el 22 por ciento de los que consumen.
¿Has golpeado o dañado algo, algún objeto que no te pertenece? siete por ciento contra 29 ¿Has atacado alguien usando algún objeto como arma, cuchillo, palo o navaja? Los que no consumen droga lo han hecho en un dos por ciento, los que sí consumen un 20 por ciento, 10 veces más violencia entre quien consume drogas y quien no lo hace ¿Has golpeado o herido apropósito a alguien? Cinco por ciento de quienes no, contra un 28 por ciento.
Podría seguir este exhaustivo el estudio, pero déjenme ir al resumen de estos actos antisociales, quien no consume drogas ha participado en la comisión de un habito antisocial, el 4.7 por ciento de los que no consumen droga ha participado en un acto antisocial, contra un 35.9, o sea casi nueve veces más como resumen quien consume droga comete actos antisociales.
Pero no sólo eso, cuál es la actitud ante la vida y ante los demás de las personas según su consumo de droga o no, ante la pregunta ¿Prefiero pelearme con mis papás, antes que mostrarles afecto? Los que no consumen droga dicen el 15 por ciento prefiere pelear, el 85 por ciento restante no, pero de los que consumen droga del 15 por ciento se va al 44 por ciento. Se evidencia desde aquí una desintegración importante en la relación hacia los papás, que quien consume droga prefiere pelear tres veces más que quien no lo hace con sus papás.
Si cometo un error ¿Prefiero que castiguen a otra persona en lugar de a mí? Quienes no consumen el 27 por ciento dice que sí, pero quien consume el 45 por ciento dice que sí. Hay un doble, el 100 por ciento arriba de incidencia entre quien consume una adicción y no acepta la responsabilidad de los actos que comete.
Hay una pregunta que en verdad es espeluznante ¿Hago lo que quiero aunque afecte a las demás personas que me rodean? El 18 por ciento de los que no consumen droga lo hacen, y el 51 por ciento de los que consumen droga lo hacen. De aquí empezamos a vislumbrar problemas de orden social, de orden legal, de convivencia: No importa hacer daño a los demás con tal de lograr lo que se quiere a quien consume drogas. Y pueden llevarlo eso al nivel que ustedes quieran, desde vender droga, desde robar autopartes, desde secuestrar a una persona, desde matar a alguien. Quien consume drogas no tiene conciencia de esto, o se ha creado una actitud personal de que lo que importa es su beneficio y su bienestar.
“Prefiero ayudar a los demás sólo cuando obtengo algo a cambio”, 25 por ciento de los que no consumen droga lo prefieren, contra un 42 por ciento de los que consumen, no hay conciencia se solidaridad, no hay compromiso de comunidad o lo hay sumamente disminuido entre quienes consumen algún tipo de droga.
Hasta en los temas ambientales ¿Están dispuestos a dañar el entorno, a ensuciar, a maltratar árboles y flores? Quienes consumen drogas 31 de ellos están dispuestos a hacerlo y lo hacen, contra 14 de quienes no consumen drogas.
Hay un apartado muy interesante también en esta encuesta que tiene que ver con la autoestima, la autoestima es fundamental para reconocer lo que vale la gente, pero reconocer también lo que valen los demás. Una autoestima adecuada evita problemas de distinta índole, ya hablamos de adicciones, pero quien tiene una autoestima baja es muy fácil que caiga en problemas de depresión, de suicidio; quien tiene una autoestima baja es muy fácil también que ejerza actos de violencia intrafamiliar, porque sino se valora a sí mismo, no valora a los demás. Vamos a ver lo que nos arroja el estudio, una visión somera de lo que nos, en este respecto:
¿Siento que tengo buenas cualidades? Una pregunta muy abierta ¿Tengo buenas cualidades? Quien no consume droga, el 84 por ciento dice que sí, tengo buenas cualidades, contra un 76 por ciento de quien consume ¿Soy capaz de hacer las cosas tan bien como casi toda la gente? 83 por ciento dice que sí, contra 76 por ciento de los que consumen ¿Tengo una actitud positiva hacia mí mismo? El 83 por ciento de los que no consumen droga la tienen, contra un 77 por ciento solamente. En general ¿Estoy satisfecho (a) conmigo mismo? Quien no consume droga un 84 por ciento sí, contra un 79 por ciento de quien consume drogas.
Y bueno, qué ocurre, cuál es el perfil entre la relación de la familia y las adicciones, a mi me queda claro lo que tiene que hacer el Gobierno y lo estamos haciendo, más y mejor educación, más y mejor acceso a la cultura, más y mejor acceso al deporte, más tiempo libre a través de una buena movilidad, más y mejor empleo, quitarnos las preocupaciones económicas, eso lo tiene que hacer el Gobierno, lo está haciendo el Gobierno y bueno no quisiera ser un informe de Gobierno aquí sino tratar de aterrizar esto en lo que nos corresponde a todos, todos, al Gobierno pero también a la sociedad, a los grupos, a los liderazgos, a las universidades, a los lideres sociales y también a nosotros en familia.
Miren, cuando empezamos a ver qué características tiene los que no consumen droga, nos empieza aparecer en este mismo estudio un perfil, que si ustedes quieren no es nada del otro mundo, sólo que ahora está medido de una manera científica aquí entre los jóvenes de Jalisco.
Quienes no son, la pregunta es la relación familiar y pregunta ¿Con qué frecuencia o mucha frecuencia, tus papás se involucran? Y resulta que quienes no consumen droga, son los que resultan más altos en que sus papás se involucran en actividades con los hijos, escolares, deportivas, de entretenimiento, de ocio; quienes hacen cosas divertidas con los hijos, los papás hacen cosas divertidas con los hijos, esos hijos son menos propensos a acudir a las adicciones. Quienes hablan con los hijos respecto de sus amigos, están dentro de los que no consumen drogas, quienes los incluyen, los papás incluyen a los hijos en la planeación de las actividades familiares, esos hijos no consumen drogas.
Y luego hay preguntas sobre los hijos hacia los papás, y resulta que quienes no consumen ninguna droga, sus papás les felicitan cuando hacen bien alguna cosa, lo que significa que el papá está enterado de lo que está haciendo y le da el reconocimiento. En esto aparece como algo muy importante, algo que es una manifestación muy sencilla pero que tiene un fundamento psicológico profundo, los jóvenes que no consumen droga tiene una característica, tienen, sienten, ven, escuchan, el cariño de sus papás, a través de un abrazo, a través de un beso, a través de una palabra cariñosa, esto es parte del perfil de los niños y de los jóvenes que no se drogan, tienen papás que les manifiestan cariño.
Yo no sé que tan complicado pueda ser eso en una sociedad tan machista como la nuestra, que una papá, bigotón, ustedes se pueden imaginar un bigotón de Los Altos y que le diga a su hijo: “Oye hijo es que yo te quiero mucho”, bueno pues quien hace eso, sus hijos son menos propensos al consumo de drogas.
Y la pregunta es así, son besos, abrazos y felicitaciones, o sea eso es lo que los niños y jóvenes rescatan de la relación positiva con sus papás, y no les estoy diciendo nada nuevo, lo que les estoy improvisando son los números que arroja este estudio científico en Jalisco.
Qué ocurre con quienes, niños y jóvenes que no son adictos, esta encuesta es general y tiene un procedimiento, una metodología probada en donde se está midiendo todos los estratos socioeconómicos, quien no consume droga, está muy satisfecho con su salud física, está tranquilo con el entorno económico, está contento con el ambiente en el que vive, está satisfecho del rendimiento académico, le gusta las exigencias de la escuela, está satisfecho con las actividades que realiza fuera de la escuela, está satisfecho consigo mismo y con su forma de ser, está contento con la relación que tiene con su papá, y está más que contento con la relación que tiene con su mamá.
Y yo le pregunto ¿Qué sociedad podemos formar si tenemos personas que viven en un entorno adecuado, que están satisfechos con los logros académicos, que no incrementan los problemas económicos, con los problemas económicos que genera la adicción, que está tranquilo viviendo en un ambiente familiar sano, pues estaremos formando ciudadanos de bien, ciudadanos con la consciencia del valor de la persona, de su persona y de los demás, que no van a golpear, que no van a violar, que no van a explotar en el trabajo porque saben que ese otro vale tanto como yo.
Estaremos formando ciudadanos respetuosos de los demás, también en el patrimonio, y no habrá quién entonces pueda estar buscando el patrimonio del otro para el beneficio personal, con los problemas que tenemos de robo, quién vive en un entorno así, sabe que se debe a su familia y a su comunidad y estaremos formando entonces familias integradas, en comunidades solidarias, en donde lo que importa no es que yo esté bien, sino que todos estemos bien.
Eso está muy claro, imagínense ¿Qué pasaría con la violencia intrafamiliar? Se acaba ¿Por qué hay violencia intrafamiliar? Porque no hemos formado personas que estén satisfechas así ¿Porqué hay adicción? ¿Por qué hay suicidios?
Bueno, todos tenemos tarea, este fue un paso importante, y agradezco y reconozco a todos los que han participado. Lo que sigue es que todo lo aterricemos, le pido a Toño Gloria, a Alfonso Petersen, a Joel Chávez, a Alonso Ulloa, a todos los que tienen que ver, a Cravioto, con educación, cultura, salud, empleo, entorno, que tomemos estos insumos para perfeccionar los programas de Gobierno tomando estas consideraciones.
¿Qué le toca hacer a las universidades? Ustedes lo tienen que definir ¿Qué les toca hacer a las empresas? Los líderes empresariales lo tienen que impulsar ¿Qué nos toca hacer a las familias? Permítanme concluir con una frase y con tres enunciados.
¿Qué tenemos que hacer los que somos papás o mamás? O papá soltero o mamá soltera, o abuelo o abuela o hermanos. Dedícale tiempo a tu familia, punto, dedícale tiempo a tu familia, se lo dedicas al trabajo, se lo dedicas a los amigos, se lo dedicas a ti mismo, al futbol, se lo dedicas a la escuela, y cuándo nos preguntan ¿Qué es lo más importante para ti? Decimos “la familia”, pues dedícale tiempo a tu familia, no puede ser de otra manera, no hay que “yo doy cinco minutos de calidad”, no, el tiempo se mide minutos o en horas y hazlo que sea de calidad.
Dedícale tiempo a tu familia ¿Cómo? Entérate, primero, entérate, que quieren tus hijos, a que aspiran, que hacen, quienes son sus amigos; entérate, que le duele a tu papá, a tu mamá, de que están enfermos, tu abuela, la dolencia que tiene, entérate, preocúpate, entérate de los demás, pero no lo hagas solamente como un conocimiento académico, interésate en lo que están haciendo, interésate en lo que les preocupa, interésate en sus proyectos, interésate sobre todo en sus problemas; y la tercera, comprométete, si en verdad es tan importante, no basta con que sepas, no basta con que acompañes, comprométete, se parte, y si el problema es muy grande y no tiene solución, por menos acompaña en el dolo, que cuando el dolor se comparte es menos, y cuando la alegría se comparte es más, comprométete con tu familia.
Es mucho lo que hay por delante, es mucho lo que tenemos que hacer, pero tengo ninguna duda de que si mantenemos este tipo de congresos, si mantenemos el compromiso y de este Congreso resultan acciones específicas como las que están surgiendo ya de este estudio, no tengo ninguna duda que podemos y que vamos a transformar la sociedad desde la familia con ayuda de la sociedad y con el compromiso también del Gobierno, pero la base es la familia, por ello felicito a todos ustedes, a los jóvenes, que me dicen que más de mil nos están viendo por aquí cerca también en el circuito cerrado; yo quisiera pedirles que continúen con este esfuerzo y que nos llevemos la tarea de aterrizar en las políticas públicas y sociales lo que surge del estudio y que los que aquí estamos como compromiso personal, de veras hagamos conciencia y tomemos el “dedícale tiempo a tu familia, si lo hacemos influiremos en un cambio positivo en la sociedad, dedícale tiempo a tu familia.
Gracias.
Hace un año también el Gobierno del Estado asumió tareas específicas, de las tareas que asumimos para con ustedes, para con las familias de Jalisco quisiera referirme a una en particular, reconociendo el trabajo de la Secretaria de Salud de Jalisco con el Doctor Petersen, de la Secretaría de Educación ahora con Antonio Gloria, del Centro Estatal contra la Adicciones con Joel, en la Universidad de Guadalajara con el Rector Marco Antonio Cortés Guardado, y el Instituto de Psiquiatría, Juan Ramón de la Fuente.
Nos hemos dado a la tarea este año de hacer un estudio a fondo de lo que ocurre, alrededor de las adicciones en nuestros jóvenes en Jalisco, hicimos un estudio profesional con el aval técnico de estas instituciones y quisiera compartir con ustedes algunos de sus resultados que tienen que concluir en políticas públicas por parte de los gobiernos pero también en acciones de la sociedad y muy en particular, en compromisos al interior de nuestras familias.
Es muy extenso el estudio, me referiré en este caso son algunas de sus variables, todos los recibos que se aplicaron, buscan medir los actos antisociales vinculados con el consumo de drogas, y se ha divido el estudio entre quienes nunca han consumido, quienes lo han hecho de manera experimental y quienes son consumidores de algún estupefaciente.
Por ejemplo, a la pregunta de si, bueno se aplicó en secundaria y en prepa en Jalisco, imaginen un poco las edades y el entorno, cuando se pregunta ¿Si ha tomado un auto sin permiso del dueño? Quien no consume lo ha hecho en el tres por ciento, quien sí consume lo ha hecho en un 18 por ciento, seis veces más esta conducta antisocial.
Se pregunta ¿ha tomado dinero o cosas con valor de 500 pesos o más? Quien no consume lo ha hecho un uno por ciento, quien sí consume lo ha hecho un 14 por ciento, o sea 14 veces más quien consume alguna droga contra quien no lo ha hecho.
¿Ha forzado cerraduras para entrar a algún lugar que no sea su casa? Lo ha hecho el uno por ciento de los que no consumen y el 12 por ciento de los que sí consumen ¿Ha tomado mercancía de una tienda sin pagarle? El cuatro por ciento de los que no consumen el cuatro por ciento lo ha hecho, contra el 22 por ciento de los que consumen.
¿Has golpeado o dañado algo, algún objeto que no te pertenece? siete por ciento contra 29 ¿Has atacado alguien usando algún objeto como arma, cuchillo, palo o navaja? Los que no consumen droga lo han hecho en un dos por ciento, los que sí consumen un 20 por ciento, 10 veces más violencia entre quien consume drogas y quien no lo hace ¿Has golpeado o herido apropósito a alguien? Cinco por ciento de quienes no, contra un 28 por ciento.
Podría seguir este exhaustivo el estudio, pero déjenme ir al resumen de estos actos antisociales, quien no consume drogas ha participado en la comisión de un habito antisocial, el 4.7 por ciento de los que no consumen droga ha participado en un acto antisocial, contra un 35.9, o sea casi nueve veces más como resumen quien consume droga comete actos antisociales.
Pero no sólo eso, cuál es la actitud ante la vida y ante los demás de las personas según su consumo de droga o no, ante la pregunta ¿Prefiero pelearme con mis papás, antes que mostrarles afecto? Los que no consumen droga dicen el 15 por ciento prefiere pelear, el 85 por ciento restante no, pero de los que consumen droga del 15 por ciento se va al 44 por ciento. Se evidencia desde aquí una desintegración importante en la relación hacia los papás, que quien consume droga prefiere pelear tres veces más que quien no lo hace con sus papás.
Si cometo un error ¿Prefiero que castiguen a otra persona en lugar de a mí? Quienes no consumen el 27 por ciento dice que sí, pero quien consume el 45 por ciento dice que sí. Hay un doble, el 100 por ciento arriba de incidencia entre quien consume una adicción y no acepta la responsabilidad de los actos que comete.
Hay una pregunta que en verdad es espeluznante ¿Hago lo que quiero aunque afecte a las demás personas que me rodean? El 18 por ciento de los que no consumen droga lo hacen, y el 51 por ciento de los que consumen droga lo hacen. De aquí empezamos a vislumbrar problemas de orden social, de orden legal, de convivencia: No importa hacer daño a los demás con tal de lograr lo que se quiere a quien consume drogas. Y pueden llevarlo eso al nivel que ustedes quieran, desde vender droga, desde robar autopartes, desde secuestrar a una persona, desde matar a alguien. Quien consume drogas no tiene conciencia de esto, o se ha creado una actitud personal de que lo que importa es su beneficio y su bienestar.
“Prefiero ayudar a los demás sólo cuando obtengo algo a cambio”, 25 por ciento de los que no consumen droga lo prefieren, contra un 42 por ciento de los que consumen, no hay conciencia se solidaridad, no hay compromiso de comunidad o lo hay sumamente disminuido entre quienes consumen algún tipo de droga.
Hasta en los temas ambientales ¿Están dispuestos a dañar el entorno, a ensuciar, a maltratar árboles y flores? Quienes consumen drogas 31 de ellos están dispuestos a hacerlo y lo hacen, contra 14 de quienes no consumen drogas.
Hay un apartado muy interesante también en esta encuesta que tiene que ver con la autoestima, la autoestima es fundamental para reconocer lo que vale la gente, pero reconocer también lo que valen los demás. Una autoestima adecuada evita problemas de distinta índole, ya hablamos de adicciones, pero quien tiene una autoestima baja es muy fácil que caiga en problemas de depresión, de suicidio; quien tiene una autoestima baja es muy fácil también que ejerza actos de violencia intrafamiliar, porque sino se valora a sí mismo, no valora a los demás. Vamos a ver lo que nos arroja el estudio, una visión somera de lo que nos, en este respecto:
¿Siento que tengo buenas cualidades? Una pregunta muy abierta ¿Tengo buenas cualidades? Quien no consume droga, el 84 por ciento dice que sí, tengo buenas cualidades, contra un 76 por ciento de quien consume ¿Soy capaz de hacer las cosas tan bien como casi toda la gente? 83 por ciento dice que sí, contra 76 por ciento de los que consumen ¿Tengo una actitud positiva hacia mí mismo? El 83 por ciento de los que no consumen droga la tienen, contra un 77 por ciento solamente. En general ¿Estoy satisfecho (a) conmigo mismo? Quien no consume droga un 84 por ciento sí, contra un 79 por ciento de quien consume drogas.
Y bueno, qué ocurre, cuál es el perfil entre la relación de la familia y las adicciones, a mi me queda claro lo que tiene que hacer el Gobierno y lo estamos haciendo, más y mejor educación, más y mejor acceso a la cultura, más y mejor acceso al deporte, más tiempo libre a través de una buena movilidad, más y mejor empleo, quitarnos las preocupaciones económicas, eso lo tiene que hacer el Gobierno, lo está haciendo el Gobierno y bueno no quisiera ser un informe de Gobierno aquí sino tratar de aterrizar esto en lo que nos corresponde a todos, todos, al Gobierno pero también a la sociedad, a los grupos, a los liderazgos, a las universidades, a los lideres sociales y también a nosotros en familia.
Miren, cuando empezamos a ver qué características tiene los que no consumen droga, nos empieza aparecer en este mismo estudio un perfil, que si ustedes quieren no es nada del otro mundo, sólo que ahora está medido de una manera científica aquí entre los jóvenes de Jalisco.
Quienes no son, la pregunta es la relación familiar y pregunta ¿Con qué frecuencia o mucha frecuencia, tus papás se involucran? Y resulta que quienes no consumen droga, son los que resultan más altos en que sus papás se involucran en actividades con los hijos, escolares, deportivas, de entretenimiento, de ocio; quienes hacen cosas divertidas con los hijos, los papás hacen cosas divertidas con los hijos, esos hijos son menos propensos a acudir a las adicciones. Quienes hablan con los hijos respecto de sus amigos, están dentro de los que no consumen drogas, quienes los incluyen, los papás incluyen a los hijos en la planeación de las actividades familiares, esos hijos no consumen drogas.
Y luego hay preguntas sobre los hijos hacia los papás, y resulta que quienes no consumen ninguna droga, sus papás les felicitan cuando hacen bien alguna cosa, lo que significa que el papá está enterado de lo que está haciendo y le da el reconocimiento. En esto aparece como algo muy importante, algo que es una manifestación muy sencilla pero que tiene un fundamento psicológico profundo, los jóvenes que no consumen droga tiene una característica, tienen, sienten, ven, escuchan, el cariño de sus papás, a través de un abrazo, a través de un beso, a través de una palabra cariñosa, esto es parte del perfil de los niños y de los jóvenes que no se drogan, tienen papás que les manifiestan cariño.
Yo no sé que tan complicado pueda ser eso en una sociedad tan machista como la nuestra, que una papá, bigotón, ustedes se pueden imaginar un bigotón de Los Altos y que le diga a su hijo: “Oye hijo es que yo te quiero mucho”, bueno pues quien hace eso, sus hijos son menos propensos al consumo de drogas.
Y la pregunta es así, son besos, abrazos y felicitaciones, o sea eso es lo que los niños y jóvenes rescatan de la relación positiva con sus papás, y no les estoy diciendo nada nuevo, lo que les estoy improvisando son los números que arroja este estudio científico en Jalisco.
Qué ocurre con quienes, niños y jóvenes que no son adictos, esta encuesta es general y tiene un procedimiento, una metodología probada en donde se está midiendo todos los estratos socioeconómicos, quien no consume droga, está muy satisfecho con su salud física, está tranquilo con el entorno económico, está contento con el ambiente en el que vive, está satisfecho del rendimiento académico, le gusta las exigencias de la escuela, está satisfecho con las actividades que realiza fuera de la escuela, está satisfecho consigo mismo y con su forma de ser, está contento con la relación que tiene con su papá, y está más que contento con la relación que tiene con su mamá.
Y yo le pregunto ¿Qué sociedad podemos formar si tenemos personas que viven en un entorno adecuado, que están satisfechos con los logros académicos, que no incrementan los problemas económicos, con los problemas económicos que genera la adicción, que está tranquilo viviendo en un ambiente familiar sano, pues estaremos formando ciudadanos de bien, ciudadanos con la consciencia del valor de la persona, de su persona y de los demás, que no van a golpear, que no van a violar, que no van a explotar en el trabajo porque saben que ese otro vale tanto como yo.
Estaremos formando ciudadanos respetuosos de los demás, también en el patrimonio, y no habrá quién entonces pueda estar buscando el patrimonio del otro para el beneficio personal, con los problemas que tenemos de robo, quién vive en un entorno así, sabe que se debe a su familia y a su comunidad y estaremos formando entonces familias integradas, en comunidades solidarias, en donde lo que importa no es que yo esté bien, sino que todos estemos bien.
Eso está muy claro, imagínense ¿Qué pasaría con la violencia intrafamiliar? Se acaba ¿Por qué hay violencia intrafamiliar? Porque no hemos formado personas que estén satisfechas así ¿Porqué hay adicción? ¿Por qué hay suicidios?
Bueno, todos tenemos tarea, este fue un paso importante, y agradezco y reconozco a todos los que han participado. Lo que sigue es que todo lo aterricemos, le pido a Toño Gloria, a Alfonso Petersen, a Joel Chávez, a Alonso Ulloa, a todos los que tienen que ver, a Cravioto, con educación, cultura, salud, empleo, entorno, que tomemos estos insumos para perfeccionar los programas de Gobierno tomando estas consideraciones.
¿Qué le toca hacer a las universidades? Ustedes lo tienen que definir ¿Qué les toca hacer a las empresas? Los líderes empresariales lo tienen que impulsar ¿Qué nos toca hacer a las familias? Permítanme concluir con una frase y con tres enunciados.
¿Qué tenemos que hacer los que somos papás o mamás? O papá soltero o mamá soltera, o abuelo o abuela o hermanos. Dedícale tiempo a tu familia, punto, dedícale tiempo a tu familia, se lo dedicas al trabajo, se lo dedicas a los amigos, se lo dedicas a ti mismo, al futbol, se lo dedicas a la escuela, y cuándo nos preguntan ¿Qué es lo más importante para ti? Decimos “la familia”, pues dedícale tiempo a tu familia, no puede ser de otra manera, no hay que “yo doy cinco minutos de calidad”, no, el tiempo se mide minutos o en horas y hazlo que sea de calidad.
Dedícale tiempo a tu familia ¿Cómo? Entérate, primero, entérate, que quieren tus hijos, a que aspiran, que hacen, quienes son sus amigos; entérate, que le duele a tu papá, a tu mamá, de que están enfermos, tu abuela, la dolencia que tiene, entérate, preocúpate, entérate de los demás, pero no lo hagas solamente como un conocimiento académico, interésate en lo que están haciendo, interésate en lo que les preocupa, interésate en sus proyectos, interésate sobre todo en sus problemas; y la tercera, comprométete, si en verdad es tan importante, no basta con que sepas, no basta con que acompañes, comprométete, se parte, y si el problema es muy grande y no tiene solución, por menos acompaña en el dolo, que cuando el dolor se comparte es menos, y cuando la alegría se comparte es más, comprométete con tu familia.
Es mucho lo que hay por delante, es mucho lo que tenemos que hacer, pero tengo ninguna duda de que si mantenemos este tipo de congresos, si mantenemos el compromiso y de este Congreso resultan acciones específicas como las que están surgiendo ya de este estudio, no tengo ninguna duda que podemos y que vamos a transformar la sociedad desde la familia con ayuda de la sociedad y con el compromiso también del Gobierno, pero la base es la familia, por ello felicito a todos ustedes, a los jóvenes, que me dicen que más de mil nos están viendo por aquí cerca también en el circuito cerrado; yo quisiera pedirles que continúen con este esfuerzo y que nos llevemos la tarea de aterrizar en las políticas públicas y sociales lo que surge del estudio y que los que aquí estamos como compromiso personal, de veras hagamos conciencia y tomemos el “dedícale tiempo a tu familia, si lo hacemos influiremos en un cambio positivo en la sociedad, dedícale tiempo a tu familia.
Gracias.
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